Prometía, pero los políticos no disponen de información completa hasta que acceden al poder, de forma que una vez accedió, se dió cuenta que su propuesta de no aumentos era insostenible: "read my lips, I lie!".
En ciencia política llamamos a estos virajes "policy switches", porque los políticos lo hacen siempre con la expectativa de que la nueva política, contradictoria con lo prometido, ofrecerá frutos positivos muy pronto y el electorado será exonerativo con el, digámoslo así, "traidor". Sin embargo, la evidencia empírica no demuestra que siempre funcione la estrategia, a no ser que los beneficios económicos sean inmediatos y contundentes. Esto explica porqué algunos presidentes populistas de Latinoamérica sobrevivieron a sus policy switches hacia el neoliberalismo e incluso consiguieron hacerlo una política de masas, muy popular (Menem, Fujimori, entre otros).
George Bush padre no mentía, pero luego tuvo que contradecirse. Esperó compensarlo con una política exterior brillante (guerra) pero a la gente eso no le importa demasiado a la hora de votar. Vota más con el bolsillo, sobre todo si la guerra queda lejos y no hay macroatentados de por medio.